Cuando una empresa es exitosa, normalmente lo es porque tiene bien identificado lo que quiere un tipo de usuario en particular y sabe servirlo bien.
Si cumple su promesa de manera consistente, no es raro que otras personas comiencen a buscar en ellos otras soluciones a las que en principio esa empresas e desarrollaba.
Las compañías que recorren este proceso, muchas veces terminan convertidas en grupos con una serie de marcas a su cargo y ahí es donde la arquitectura de marcas hace su aparición.
Una arquitectura bien lograda normará la relación entre las marcas para que funcionen de manera eficiente y además que cada una tenga públicos, lenguaje e ideologías bien definidas.
Construir tu estructura de marcas es como construir un edificio, lo importante está en los cimientos.