Como ya vimos anteriormente, hay muchas razones válidas para rediseñar tu marca, en general esas razones están relacionadas con objetivos de negocios claros y bien definidos.
Esta vez queremos hablarte de una razón que se presenta comúnmente y que no es un motivo válido para cambiar y es, estar aburrido.
Pasa con los fundadores, con los responsables de marca y con sus equipos, que al ser ellos los que más ven sus propios mensajes tienen una sensación de repetición y quieren cambiar cuando sus usuarios apenas están comenzando a captar su mensaje.
En estos casos rediseñar tal vez no sea el camino. Lo mejor es fortalecer tu marca con un sistema visual y un discurso que permita sentirla siempre flexible y variada.